“Todos los meses hay un aumento que supera el ritmo inflacionario, tanto en generación como en distribución”, señaló Garibotti, remarcando que la situación golpea aún más en el interior del país, donde los servicios son más caros y los subsidios, más escasos.

Pero el eje más delicado está puesto en las garrafas de 10 y 12 kilos, que “son las más usadas por las familias de menos recursos”. Hasta ahora, el Estado regulaba parcialmente este mercado e incluso ofrecía un precio de referencia. Sin embargo, el Gobierno decidió eliminar también esa referencia, dejando a los consumidores totalmente desprotegidos frente a los abusos.

El precio subió entre un 10% y un 20% en las últimas semanas”, explicó Garibotti. Y agregó: “En enero ya habían anunciado que se liberaban los precios, pero al menos seguían publicando un valor de referencia que servía como guía. Ahora, ni eso”.

La exfuncionaria apuntó que incluso desde una perspectiva liberal, eliminar la información de precios no tiene lógica: “Desde cualquier punto de vista, incluso liberal, la transparencia de precios es clave. Si no hay referencia, el consumidor no puede defenderse”.

La situación es particularmente crítica para las zonas alejadas de los centros urbanos, donde el acceso a la red de gas natural es limitado o inexistente. En esos casos, la garrafa es la única alternativa. “Tenemos un país enorme, con poblaciones muy dispersasLlegar con gas por red es difícil, pero el Estado tiene la responsabilidad de garantizar el acceso a la energía. Si no es gas, debe ser electricidad segura o alternativas accesibles”, planteó.

Garibotti también destacó el contraste entre los recursos energéticos de la Argentina y la exclusión energética de una gran parte de su población. “Tenemos una de las reservas de gas y petróleo más importantes del mundo, y sin embargo hay millones de personas que no pueden calefaccionarse”, lamentó.

Finalmente, expresó su preocupación por lo que pueda ocurrir después de las elecciones. “Te la regalo después de octubre cuando quiten lo poco que queda de subsidios”, advirtió, señalando que los incrementos serán aún más fuertes si no se revierten estas decisiones.